Domaine Bousquet, una de las fincas vitivinícolas sostenibles líderes en el mundo, ha citado la ‘excelencia en el compostaje’ como clave para la viticultura regenerativa y alcanzar el cero neto de carbono. Para demostrar que se toma en serio el compostaje, la finca Mendoza ha contratado a un consultor de compostaje, Bruno Follador.
Follador, es un reconocido experto internacional en biodinámica y compost a escala agrícola y ha trabajado en más de 12 países. En 2015 fue nombrado como uno de los 20 principales innovadores que protegen el planeta por la organización Food Tank, EE. UU.
Follador y el resto del equipo de Domaine Bousquet, en Gualtallary, están trabajando para mejorar la materia orgánica, conservar mejor el suelo y aumentar las interacciones beneficiosas entre plantas y microorganismos en la finca de 672 acres.
El compostaje efectivo también se alinea con la ambición de la empresa de volverse neutral en carbono este año. Reducir la perturbación del suelo (la finca no ha practicado la labranza durante más de un año), así como fomentar los cultivos de cobertura y la flora natural son claves para aumentar los nutrientes, la porosidad y aumentar el secuestro de carbono, afirma Domaine Bousquet.
Follador, es un reconocido experto internacional en biodinámica y compost a escala agrícola y ha trabajado en más de 12 países. En 2015 fue nombrado como uno de los 20 principales innovadores que protegen el planeta por la organización Food Tank, EE. UU.
Follador y el resto del equipo de Domaine Bousquet, en Gualtallary, están trabajando para mejorar la materia orgánica, conservar mejor el suelo y aumentar las interacciones beneficiosas entre plantas y microorganismos en la finca de 672 acres.
El compostaje efectivo también se alinea con la ambición de la empresa de volverse neutral en carbono este año. Reducir la perturbación del suelo (la finca no ha practicado la labranza durante más de un año), así como fomentar los cultivos de cobertura y la flora natural son claves para aumentar los nutrientes, la porosidad y aumentar el secuestro de carbono, afirma Domaine Bousquet.
Irma Remigio, coordinadora de gestión ambiental y biodinámica de la bodega, explicó a Canopy la importancia del compostaje: “El compost es realmente una forma de reciclaje; tomar materia del suelo y devolverla en mejores condiciones, para que la micro y macroflora del suelo pueda desarrollarse en términos de nutrientes, pero también en términos de estructura del suelo. El compostaje genera un desarrollo saludable de las plantas, resistencia a enfermedades y reduce fungicidas. Cuando el científico francés Antoine Lavoisier dijo: ‘Nada se pierde, todo se transforma’, no podía tener más razón, y en Domaine Bousquet nos lo tomamos muy en serio. El compostaje es un componente vital en el círculo natural de los suelos y la vida del carbono”.
Pero no es una solución rápida. Irma continuó: “El compostaje lleva tiempo; el material que usaremos esta temporada aún está madurando, por lo que hay un elemento de observación y espera de lo que estamos haciendo en este momento. Pero para los próximos años tenemos pensado estudiar la evolución de la calidad de cada uno de nuestros suelos y de las plantas, aunque ya sabemos que es el mejor camino para la finca”.
El estudio consiste en controlar la temperatura, la humedad, el pH y la conductividad de la evolución del compost. “Hay fases que podemos esperar en la línea de tiempo del compost”, reveló Irma. “Parámetros como la temperatura y la humedad se registran en un gráfico de curvas, luego podemos decidir el momento perfecto para regarlo o incluso mezclarlo para reactivarlo mediante aireación. La curva también indica cuando el compost ya está maduro para que podamos enviarlo a un análisis más completo antes de decidir cómo y cuándo lo vamos a usar”.
Un buen compost brinda no solo nutrientes y estructura física, mitigación de la erosión y mejor porosidad del suelo, sino que también permite el microdesarrollo y la diversificación de la tierra. Esta diversificación también conduce al equilibrio de la levadura, lo que afecta directamente al vino final; el equilibrio de la levadura en la uva significa fermentaciones espontáneas más estables y menos intervenciones.
Como resultado, el equipo ahora está tan enfocado en la evolución del compost como en la fermentación de sus mostos.
Trabajar a una escala tan grande tiene sus desafíos, admitió Irma. “Con una finca grande, la planificación es especialmente importante, al igual que el control tanto de la calidad como de la cantidad de materiales, las proporciones y la humedad. Así como la maquinaria requerida”, dijo.
Domaine Bousquet ya ha invertido en un pequeño rebaño de diez ovejas para ayudarlos. Fueron traídas al viñedo a finales del año pasado para potenciar su ciclo cerrado de nutrientes. Las ovejas, así como las vacas, los caballos, las gallinas, los patos y la fauna local, constituyen una excelente fuente de material de compostaje.
Aparte de las diez ovejas, los otros animales son propiedad de los granjeros locales. “Elegimos a los agricultores locales y los apoyamos financieramente, como parte de nuestro compromiso con la sostenibilidad de la economía local”, dijo Irma. “La agricultura en corrales de engorde no está permitida en la agricultura biodinámica; no es saludable para los animales ni para el medio ambiente ya que aumenta la huella de carbono. Uno de los ideales de la biodinámica es construir una comunidad sólida y sustentable y el compostaje es parte de esto”.
Domaine Bousquet, propiedad y dirigida por el equipo formado por marido y mujer Labid al Ameri y Anne Bousquet, obtuvo la certificación B Corp a finales de 2022 y se convirtió en la cuarta finca vinícola (la primera fuera de los EE. UU.) en recibir el estatus de Certificado Orgánico Regenerativo el pasado año. Es un logro notable para una empresa vitivinícola que solo compró su primera parcela de tierra en Tupungato, Mendoza, en 1997.Encontrá la nota haciendo click aquí.
Pero no es una solución rápida. Irma continuó: “El compostaje lleva tiempo; el material que usaremos esta temporada aún está madurando, por lo que hay un elemento de observación y espera de lo que estamos haciendo en este momento. Pero para los próximos años tenemos pensado estudiar la evolución de la calidad de cada uno de nuestros suelos y de las plantas, aunque ya sabemos que es el mejor camino para la finca”.
El estudio consiste en controlar la temperatura, la humedad, el pH y la conductividad de la evolución del compost. “Hay fases que podemos esperar en la línea de tiempo del compost”, reveló Irma. “Parámetros como la temperatura y la humedad se registran en un gráfico de curvas, luego podemos decidir el momento perfecto para regarlo o incluso mezclarlo para reactivarlo mediante aireación. La curva también indica cuando el compost ya está maduro para que podamos enviarlo a un análisis más completo antes de decidir cómo y cuándo lo vamos a usar”.
Un buen compost brinda no solo nutrientes y estructura física, mitigación de la erosión y mejor porosidad del suelo, sino que también permite el microdesarrollo y la diversificación de la tierra. Esta diversificación también conduce al equilibrio de la levadura, lo que afecta directamente al vino final; el equilibrio de la levadura en la uva significa fermentaciones espontáneas más estables y menos intervenciones.
Como resultado, el equipo ahora está tan enfocado en la evolución del compost como en la fermentación de sus mostos.
Trabajar a una escala tan grande tiene sus desafíos, admitió Irma. “Con una finca grande, la planificación es especialmente importante, al igual que el control tanto de la calidad como de la cantidad de materiales, las proporciones y la humedad. Así como la maquinaria requerida”, dijo.
Domaine Bousquet ya ha invertido en un pequeño rebaño de diez ovejas para ayudarlos. Fueron traídas al viñedo a finales del año pasado para potenciar su ciclo cerrado de nutrientes. Las ovejas, así como las vacas, los caballos, las gallinas, los patos y la fauna local, constituyen una excelente fuente de material de compostaje.
Aparte de las diez ovejas, los otros animales son propiedad de los granjeros locales. “Elegimos a los agricultores locales y los apoyamos financieramente, como parte de nuestro compromiso con la sostenibilidad de la economía local”, dijo Irma. “La agricultura en corrales de engorde no está permitida en la agricultura biodinámica; no es saludable para los animales ni para el medio ambiente ya que aumenta la huella de carbono. Uno de los ideales de la biodinámica es construir una comunidad sólida y sustentable y el compostaje es parte de esto”.
Domaine Bousquet, propiedad y dirigida por el equipo formado por marido y mujer Labid al Ameri y Anne Bousquet, obtuvo la certificación B Corp a finales de 2022 y se convirtió en la cuarta finca vinícola (la primera fuera de los EE. UU.) en recibir el estatus de Certificado Orgánico Regenerativo el pasado año. Es un logro notable para una empresa vitivinícola que solo compró su primera parcela de tierra en Tupungato, Mendoza, en 1997.Encontrá la nota haciendo click aquí.